Nos encontramos con empresas que están invirtiendo cientos de miles, o incluso millones de euros, en sus propios proyectos de digitalización, sistemas diseñados para dar una respuesta personalizada a los procesos específicos de su cadena de suministro.
Es el síndrome de «sí, pero aquí es diferente».
Existen soluciones en el mercado que permiten una personalización extrema, en todas las áreas de la empresa: finanzas, distribución, compras y, posiblemente, producción, aunque esta última área presente a menudo una capa adicional de complejidad.
Para adaptar estas soluciones, recurrimos a desarrolladores de modelos, especialistas informáticos y consultores especializados. Pasarán meses trabajando y desarrollando LA solución para responder a las expectativas de los distintos equipos de la empresa. La propia empresa necesitará sin duda contratar especialistas capaces de comprender, mantener y desarrollar estos modelos. Los editores de estas plataformas de digitalización están desarrollando programas de formación y certificación para diseñadores de modelos, con el fin de desarrollar un conjunto de competencias un poco escasas, y por tanto caras…
La aparición de herramientas de bajo código o sin código también puede contribuir a esta personalización extrema de los procesos. Si antes exportábamos a Excel, aplicábamos rutinas internas y volvíamos a importar el resultado, hoy desarrollamos una aplicación que extrae datos a través de una API, realiza transformaciones, aplica reglas de negocio, permite la edición en páginas web y devuelve el resultado a través de la API. Es más moderno, pero igual de frágil e insostenible…
A esto se añade la moda del momento: la inteligencia artificial, preferiblemente generativa – si la IA puede inventar imágenes y vídeos fotorrealistas, ¿por qué no iba a ser capaz de generar mi S&OP, planificar el taller, sustituir a nuestros planificadores, con un modelo personalizado especialmente adaptado a nuestro negocio? No sonría, hoy en día existen realmente empresas que invierten en consultoras y desarrolladores de software para proyectos de este tipo.
Cuando vuelves al terreno, al taller y a los planificadores, enseguida te das cuenta de que no es ahí donde está la necesidad. En el 90% de los casos, la necesidad es implantar eficazmente elementos básicos, con procesos probados:
- Dimensionamiento y control de inventarios,
- Limitar el trabajo en curso,
- Gestionar las colas,
- Establece ruedas de planificación,
- Secuenciar las operaciones con eficacia,
- Cuellos de botella de carga con capacidad finita,
- Generar previsiones (imprecisas pero necesarias),
- Distribuir los productos uniformemente por toda la red,
- Anticipar las necesidades, la carga de trabajo y la capacidad para apoyar el S&OP,
- Gestiona las excepciones,
- Acceso constante a la visibilidad agregada para la toma de decisiones.
Los principios de estos bloques son bien conocidos: las escuelas de pensamiento Lean, Teoría de las Limitaciones (TOC), MRP y DDI han formalizado este conocimiento: ¡buenas noticias, las ruedas existen! Lo que a menudo ha faltado son las soluciones digitales para hacerlas girar.
Este es el espíritu con el que Demand Driven Technologies lleva desarrollando desde 2011 las soluciones que ahora se integran en Intuiflow, y que han sido probadas en cientos de proyectos. De hecho, probablemente no sea tan diferente para usted… Antes de embarcarse en un proyecto para digitalizar su cadena de suministro, no dude en preguntarnos: ¡puede que ya tengamos algunas ruedas en nuestros estantes para equipar sus flujos!…
